el alojamiento es encantador, rodeado de árboles y montañas que brindan una paz absoluta. el desayuno estaba riquísimo, con productos de calidad que hicieron mi mañana aún mejor.

el servicio en el restaurante podría ser más ágil.

Entorno natural, ubicación tranquila, acceso a rutas de senderismo

No puedo creer lo incómodas que fueron las campanas del monasterio en la mañana!!! Además, la señal de WiFi a veces era un poco inestable y definitivamente podría mejorar. ¡Una experiencia un poco decepcionante!!!

Recomiendo para desconectar y disfrutar

Estuvimos en un lugar encantador, la acogida de las dos hermanas fue fantástica, nos hicieron sentir como en casa desde el primer momento. cenamos allí y la lasaña de verduras fue algo que no puedo olvidar, simplemente deliciosa.

No fue barato, pero eso es aceptable por la calidad que ofrecen.

Un lugar perfecto para desconectar, rodeado de naturaleza y paz. Las habitaciones son cómodas y están muy bien equipadas. Me encantó el desayuno, con productos frescos y de calidad. Además, el personal fue muy amable y servicial durante toda nuestra estancia.

La señal de WiFi a veces era un poco inestable y podría mejorar.

El desayuno estaba riquísimo con productos de calidad.

Un encanto absoluto, con habitaciones cómodas y un restaurante que sirve platos vascos deliciosos. El personal súper amable y las vistas son impagables. Ideal para desconectar en la naturaleza.

Las campanas del monasterio son un verdadero despertador matutino!

una experiencia familiar extraordinaria con un toque personal y recomendaciones sobre rutas cercanas en la naturaleza

Goiko-Benta Ostatua es un rincón mágico donde la calidez familiar se une a una atención excepcional. Las anfitrionas me hicieron sentir como en casa desde el primer momento. Las comidas son absolutamente deliciosas, preparadas con amor y dedicación, destacando por su calidad y sabor. Además, el entorno ofrece rutas para caminar que son simplemente impresionantes. Un lugar que te abraza y te hace querer volver.

acogedor y con encanto

El entorno natural rodeado de arboles y montañas creaba una atmósfera mágica. El desayuno fue un verdadero festín de sabores, con productos frescos que realmente marcan la diferencia. Además, el personal siempre fue amable y dispuesto a ayudar en cualquier momento.

Sin embargo, el servicio en el restaurante podría mejorar su agilidad.

La experiencia fue muy positiva, con un restaurante que ofrecía platos deliciosos y un ambiente acogedor. Sin embargo, el servicio fue un poco lento en algunas ocasiones, lo que podría mejorar. A pesar de esto, me encantaría volver para disfrutar de las rutas de senderismo y la tranquilidad del entorno.

Es un lugar acogedor con acogedoras habitaciones y una terraza ideal para disfrutar de la brisa montañesa, y actividades de senderismo cercanas para explorar la belleza natural.

Disfruté de una comida maravillosa en Goiko-Benta Ostatua. Empecé con una selección de entrantes que me sorprendieron gratamente. El solomillo a la mostaza, delicioso y jugoso, realmente destacó. Solo desearía que el servicio hubiera sido más ágil, pero la experiencia general fue muy satisfactoria.

la habitación era espaciosa y todo estaba limpie. el menú de cena fue caro.

Un refugio sereno rodeado de naturaleza. Las anfitrionas son encantadoras y hacen sentir a todos como en casa. El desayuno es un festín de sabores, todo de calidad. Perfecto para desconectar, con rutas impresionantes para explorar.

El servicio en el restaurante podría ser un poco más ágil.